Un mercado competitivo · Gestión de la eficiencia en el despacho de abogados · Legal project coaching

Constatación de la elevada competitividad

del mercado de la abogacía nacional

Un simple análisis del sector de la abogacía en España nos desvela datos claros y relevantes: El mercado de la abogacía es uno de los mercados más competitivos. El gran número de abogados colegiados lleva a España a ser el país del mundo con más abogados por habitante.

Otro dato de importancia es una media de edad baja, lo que supone una experiencia menor en los profesionales ejercientes. Y por otro lado el aumento de las sociedades profesionales frente al ejercicio individual de la abogacía.

Y un último dato de gran interés, el aterrizaje de despachos extranjeros incorporando nuevas y eficientes formas de gestión y organización del ejercicio profesional.

El camino que tenemos que seguir los abogados para

gestionar nuestros despachos con eficiencia

1· La rentabilidad de los recursos humanos

Tanto para grandes firmas como para pequeños despachos o despachos individuales, un elemento es decisivo en términos de rentabilidad de los recursos humanos disponibles: La especialización

La mayor complejidad del ordenamiento jurídico ha ido propiciado que vaya desapareciendo la figura del ‘abogado generalista’ frente al abogado ‘especializado’ en una rama específica. La especialización es determinante en la prestación de un servicio profesional de mayor calidad, permitiendo al abogado mostrar su específica preparación, su competencia y su experiencia proporcionando consecuentemente un mayor aporte de valor para el del cliente.

2 · Gestión de procesos

Al lado de especialización, la estandarización de aquellos servicios que venimos prestando como abogados, y que algunos ya se pueden realizar incluso de forma automatizada como son la constitución de sociedades, impuestos, algunos contratos, ciertos cobros de deudas…

Saber diferenciar aquellos asuntos que requieren conocimientos y razonamientos complejos de aquellos otros que puedan sistematizarse por ser rutinarios o por suponer la aplicación directa de una norma al supuesto concreto por ejemplo, nos lleva a una mayor sostenibilidad y eficiencia de nuestros recursos.

Estos servicios simplemente suponen una prestación cuya mayor eficiencia a través de la estandarización de procesos suponen un ahorro de costes y de tiempo que consecuentemente conlleva la satisfacción del cliente.

3 · Gestión del conocimiento

Los despachos de abogados manejan gran cantidad de información técnico-jurídica y de tratamiento de hechos en el ejercicio de la abogacía. Precisamente conocimiento e información son unas variables importantes para el efectivo ejercicio de la profesión.

Es inexcusable un sistema eficaz de gestión del conocimiento del caso, y no debe hacerse extraño un sistema o método de gestión de conocimiento del cliente.

Reclutar, sistematizar, clasificar, analizar e interpretar la información del caso y en relación al cliente nos va a permitir sacar el máximo provecho de nuestro propia experiencia y conocimiento. Por un lado, ante el tratamiento de casos similares, el establecimiento de criterios de nuestros juzgados… o ante el posible conflicto de intereses en la prestación de un nuevo servicio entre dos de nuestros clientes…

Por otro lado, y no menos importante, la gestión adecuada de conocimiento del cliente para desarrollar estrategias de comunicación y marketing personalizadas, tan importantes y necesarias para la captación y fidelización de clientes para nuestro despacho.

Las nuevas tecnologías nos ofrecen ya sistemas que nos facilitan la gestión del conocimiento.

4 · Gestión de la satisfacción del cliente

Uno de los pilares fundamentales para la satisfacción de las necesidades de un cliente que cada vez es más exigente es mantenerle puntual y debidamente informado haciéndole sentir implicado y directamente partícipe.

El sistema judicial es lento, todos lo sabemos. El tiempo que transcurre hasta el siguiente trámite se hace interminable, nuevas actuaciones, suspensiones de sala… cada caso, cada asunto es un mundo, pero no por ello debemos dejar olvidado al cliente en esos lapsos de tiempo. Transmitirle seguridad y la tranquilidad de que para nosotros su caso es tan importante como el que más redundando en la percepción de calidad de nuestros servicios y siendo fundamental para mantener la preciada confianza del cliente.

5 · Gestión del tiempo

Se hace imprescindible el hábito en la elaboración de Planes de trabajo para la estimación del tiempo que nos supondrá el estudio y preparación del caso. Y los plazos. Y las múltiples gestiones extrajudiciales y judiciales derivadas del caso, y personales en la relación con el cliente.

Y también es fundamental desarrollar la capacidad para anticiparse a los problemas, y negociar, y resolverlos de la manera más eficaz tomando las decisiones oportunas.

6 · Gestión financiera

En abogacía es difícil establecer una ecuación de productividad. Los servicios profesionales de la abogacía no sólo son muy variados, sino que, a su vez están sujetos a incidentes o variables en ocasiones posibles, en ocasiones previsibles y en ocasiones imprevistas. La casuística es amplia, por ello el control de riesgos y costes se hace imprescindible.

Es fundamental establecer un sistemática para no dejar de elaborar presupuestos gestionando y optimizando la asignación de los recursos humanos y materiales que asignaremos al asunto, la provisión de fondos y la facturación de minuta, siendo conscientes que actualmente el precio es un factor determinante para tomar la decisión de contratación de un despacho. Pero también, en términos de sostenibilidad y de eficiencia tomar nuestras propias decisiones en la aceptación del caso.

Cristina M. Ruiz Pérez

Abogado · Consultora creativa

‘Legal project coaching’ (Descarga el documento)

«Los abogados no debemos, no podemos dejar de ser eficientes en nuestra vida profesional”.

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